martes, 3 de mayo de 2011

El declive panista

La estrategia "del rebaño", quien sabe quién fue el "genio" que recomendó a PANistas la gran idea de manejarse de sa manera, para presentar a sus "candidatos"

Pero lo que sí se sabe y está a los ojos de todos es que el partido azul está desorientado y descabezado, ya ni manejan sus tradiciones emblema, como la confrontación de ideas, personalidades y proyectos de los distintos pretensos a puestos de elección popular —como la candidatura presidencial—, sin olvidar la saludable pelea entre los aspirantes, que exhibía el pasado de cada uno, además de sus habilidades, cualidades y defectos.

En lugar de esa democrática y sana disputa que hizo historia en el PAN, hoy veremos una pasarela de pretensos presidenciales que no se tocarán ni con el pétalo de una mentada de madre, menos criticarán sus errores y horrores, y no se diga sus pasados harto cuestionables. Veremos a los Siete Fantásticos Azules convertidos en defensores a ultranza del gobierno de Felipe Calderón, como si el Felipe no hubiese cometido errores y no mereciera severas críticas de su partido, sus correligionarios y de quienes aspiran a sucederlo.

Juntitos, tomados de la mano, con los brazos en alto en imaginaria ola, veremos a los presidenciables del "rebaño azul" defender hasta la ignominia al gobierno de Calderón.

De hecho, la sumisión, el halago desmedido —al estilo de Javier Lozano respecto al gobierno de Calderón—, eran parte fundamental de la sucesión en los tiempos del viejo PRI, pero ellos son originales, con vida e ideas, y proyectos propios, no copian nada de ningun partido.

Pero resulta que el PAN siempre criticó esa sumisión, siempre reclamó que los aspirantes a puestos de elección popular "pensaran con cabeza propia", que "rompieran el cordón umbilical con el presidencialismo", que "renunciaran a sus cargos, para buscar por la libre la candidatura presidencial".

Hoy el PAN, que rebasa los 70 años de vida partidista, hace de viejo todo aquello que criticó de joven. ¿Por qué los siete del "rebaño azul" aceptan esa sumisión, la mordaza para no criticar a sus compañeros; por qué no renuncian a sus cargos y se lanzan como demócratas a buscar un lugar en los espacios de lo diferente, lo original, lo nuevo; por qué se pliegan al culto a la personalidad los señores Creel, Cordero, Lujambio, Lozano, Félix y González, y la señora Vázquez Mota?

Lo patético del rebaño azul y de su pastor es que ya ni en el PRI existe esa sumisión.

Esto es..por miedo, descontrol, desunión...pues cómo no van a tener miedo si Caldeón, acaba de correr al expresidente del pan, es terror!!!

el regreso del PRI es imbatible, para eso se necesita que nosotros los priístas trabajemos hombro con hombro eligiendo al mejor candidato..dícese..."el candidato natural", que garantice el triunfo, y no caprichos que lo unico que hacen es esto, lo que paso en Sonora, Cajeme..etc...

Paz profunda!!!