de "operadores politicos" del PAN y cosas peores

Al entrar las campañas a su etapa decisiva, los funcionarios estatales con experiencia en tareas electorales cumplen funciones de operadores en diferentes regiones de Sonora. Así, Paco Bueno, el experto en estas lides, recibió la comisión de trabajar en la conflictiva Cajeme, mientras Pancho Platas en Guaymas. Y la revelación, Teresa Lizárraga, fue enviada a Navojoa, una región de sumo interés para el proyecto transexenal del Nuevo Sonora. Pero la directora de ISSSTESON enfrenta, en ausencia, ciertos problemillas con auditores del desdentado ISAF y circula la versión de que es investigada por la FEPADE. El Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización del Estado de Sonora (ISAF), como es del conocimiento público, carece de dientes para aplicar sanciones. Pero hace su chamba hasta donde sus limitadas atribuciones se lo permiten. Así fue creado, para honrar la opacidad que tanto criticaron los diputados panistas de la anterior legislatura, sobre todo sus entonces coordinadores de bancada, Florencio Díaz Armenta y Francisco García Gámez. Y en su visita a las oficinas del ISSSTESON, los auditores del ISAF se encontraron con la novedad de que la directora de la dependencia, doña Tere Lizárraga, tiene dos meses trabajando en las campañas panistas en Navojoa, acompañada de su vocera, Luz Arredondo, cuya oficina también fue visitada por los representantes del Congreso del Estado que “promueven la transparencia y rendición de cuentas por parte de cualquier ente público o privado que maneje, custodie o aplique recursos públicos del Estado o municipios”. Desconocemos las observaciones que hicieron los auditores del ISAF en el ISSSTESON. En Comunicación Social buscaron a su titular, Luz Arredondo, pero no la encontraron. Tampoco encontraron el oficio de comisión de la funcionaria. Como encargado de oficina quedó Ernesto Arredondo, quien, reportan, se la lleva editando su revista Son Deportes. Claro, en su horario de burócrata. Reportan que en esta oficina han sido cesados Jesús “El Chacho” Valencia (desde hace algunos años este periodista en prolongado receso estaba comisionado en el hospital Ignacio Chávez) y Mirna Aguayo. Aparte, reportan, hay varias denuncias de personal sindicalizado que se queja de recibir malos tratos. Pero esto vendría siendo una nimiedad burocrática, en sus alcances, aclaramos, no así para la dignidad de los empleados reprimidos. Resulta que en ISSSTESON circula la especie que la FEPADE se enteró de ciertos movimientos nada claros de apoyos a las campañas del PAN. La especie no confirma si aquí aplicaría el caso de la directora Tere Lizárraga, quien encabeza a todo un equipo de trabajo electoral en Navojoa. Pero no crea usted, caro lector, que todo es tragedia, parodia o farsa en el ISSSTESON. Para nada. El telón del teatro se abrió para dar paso a la frivolidad de la comedia. Como ejemplo, una verdadera perla de sabiduría y sensibilidad gubernamental: Resulta que la jefa del voluntariado en esa institución, Norma Torres, aprovechando que la directora se encuentra muy ocupada en misiones electorales, saca a sus mascotas a dar la vuelta en vehículos oficiales equipados con refrigeración. Sería verdaderamente inhumano que los consentidos perritos sufran calor. Doña Norma es esposa de David Zazueta, secretario particular de Tere Lizárraga. Contamos con más información de este asunto en que la seguridad social se convierte en arma electoral, pero lo reservamos para más adelante. Las campañas apenas están entrando a su momento sabroso. Ya compartiremos con usted, caro lector, las peripecias de la directora del ISSSTESON y su vocera… ah!, y de los perritos refrigerados. Actos de rapiña suspendidos en SIDUR La adoración al tributo, o “aportación voluntaria” de constructores que trabajan obras para la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano, está momentáneamente en receso por la falta de presupuesto. Sus oficinas lucen desoladas. Pero aquí empieza a tomar importancia el grupo que encabeza Josafat Palafox, hijo del secretario, “El Pala”, a quien una enfermedad le cortó su carrera al Senado de la República. Josafat ya tiene despejado el camino. Por eso hizo a un lado al hermano de Juan Valencia, el presidente del PAN en Sonora. Pero este control no se hizo de la noche a la mañana. La red de complicidades fue tejida lentamente por un “Pala” que ansiaba ser senador para después meterse a la sucesión gubernamental. Primero puso a la esposa de Josafat como directora de Administración y Recursos Humanos de SIDUR. Posteriormente incorporó a Fernando Chío, de Bienes y Concesiones, casado con una hermana del “Pala”. Josafat fue incrustado en la nómina de Turismo, pero al verse mermada la salud del secretario, fue despedido. Este joven con fama de junior alcanzó fama por “firmar los cheques de papá”. Por el lado contrario se encontraba, por aquello de los sanos equilibrios del poder, el hermano de Juan Valencia, quien perdió el duelo. En esta red de maquinaciones y juegos del poder, donde las mochadas se convirtieron en tema recurrente, ya que como sello del Nuevo Sonora se decreto que las comisiones fueran del 30 por ciento sobre el valor de la obra asignada y con pago por adelantado, hubo ciertos detalles que llamaron la atención de propios y extraños. Por ejemplo, el caso del subsecretario Sergio Fernández Orozco, oriundo de San Luis Río Colorado, igual que su jefe, el secretario. Resulta que en cierta ocasión funcionarios amigos fueron a su casa y se encontraron con la nada agradable visión de ver una buena cantidad de propaganda de Enrique Peña Nieto, como camisetas y pendones. Esta propaganda llegó a Hermosillo por vía terrestre a mediados del pasado mes de mayo. ¿Le suena el nombre de este funcionario, caro lector? Pues es el mismo que declaró que por falta de presupuesto no había un solo proyecto nuevo de obras en 2012. Con esa declaración, el subsecretario de Obras Públicas contradecía al propio gobernador y sus principales colaboradores que se ufanaban que todo caminaba correctamente y que no hacía falta la autorización presupuestal. Bien dicen que en política no hay casualidades. “Durmiendo con el enemigo”.